¿Por qué decidió dedicarse a la investigación?
Llegué a la investigación un poco de rebote. Cuando terminé la carrera empecé a trabajar en una empresa y vi que ese no era mi camino. Siempre me había llamado la docencia, así que cuando me surgió la oportunidad de una plaza de profesor asociado en la universidad decidí probar. Al estar en la universidad empecé a trabajar en temas de investigación que vi que me gustaban y, gracias a eso, aquí estoy.
¿Siempre tuvo claro a qué quería dedicarse?
No realmente. Cuando decidí que estudiar dudaba entre Medicina o una Ingeniería, al final me decanté por Ingeniería de Telecomunicaciones. No obstante, precisamente la investigación y mi tesis doctoral me permitieron compaginar ambos campos, ya que actualmente trabajo en Ingeniería Biomédica.
¿Cuánto tiempo lleva vinculado al I3A y qué destacaría del Instituto?
Desde que empecé, ya que terminé la carrera en 2002, que es cuando se fundó el Instituto. Cuando estuve haciendo la tesis evidentemente no era miembro del I3A porque no era doctor, pero siempre he tenido vinculación con el Instituto.
Del I3A, destacaría fundamentalmente los servicios que proporciona a los investigadores. En nuestro grupo, BSICoS, usamos principalmente, por ejemplo, el clúster de computación, que es un poco la herramienta que más nos sirve. Además, creo que es un entorno que potencia las colaboraciones entre los distintos investigadores, aunque es verdad que creo que de eso falta un poco, también por nuestra parte.
En su grupo de investigación, ¿cuáles son las líneas o áreas de trabajo más destacadas?
Nuestro grupo de investigación es bastante grande, entonces cada uno de los investigadores seniors somos responsables de unas líneas de investigación. Aunque una de las cosas que a mí me gusta mucho es todo aquello que nos une y que nos permite colaborar científicamente.
En particular, yo soy responsable de la línea de investigación asociada al tema respiratorio. Mi investigación ha estado centrada en la señal fotopletismográfica de pulso, y colaboro muy estrechamente con líneas que dirigen otros compañeros como la de sistema nervioso autónomo o dispositivos wearable
¿Hay algún proyecto del cual esté particularmente orgulloso debido a su impacto en la sociedad o en el ámbito académico?
Estoy bastante contento con un proyecto que estamos desarrollando ahora que pretende ayudar al diagnóstico de trastornos del sueño porque fueron, precisamente, las líneas que desarrollé durante mi tesis. Entonces fue una investigación más básica, y ahora han pasado ya muchos años, pero este proyecto es la continuación de todo ese trabajo y de lo que se hizo posteriormente, aunque haciéndolo un poco más cercano a la sociedad, es decir, acercar esa investigación y ese trabajo al día a día de forma real.
¿Cómo visualiza el futuro de su área de investigación? ¿Hay tendencias o desafíos que le parezcan particularmente interesantes o importantes?
Nuestra investigación siempre ha sido en entornos clínicos hospitalarios con médicos. Y, ahora, lo que creo que hay es una cierta tendencia con todo el boom de los dispositivos wearable a esa monitorización fuera de los hospitales. Esto tiene unas características diferentes, tiene un gran potencial porque te permite llegar a muchos pacientes de forma sencilla, pero la calidad y el entorno no es el mismo, entonces, el contexto cambia. De hecho, en el grupo estamos orientando la investigación en ese sentido, sin descuidar la parte más clínica hacia esa parte más traslacional de llegar al gran público.
¿Qué es lo que más disfruta de su profesión? ¿Y lo que menos?
Lo que más la libertad, poder decidir qué es lo que quiero hacer, que es lo que me gusta, lo que me motiva. Lo que menos, la parte de la burocracia, me gustaría que alguien alguna vez cuantificara el coste que tiene todo el tiempo que dedicamos a según qué cosas que creo que son un poco prescindibles.
¿Qué le diría a quien esté pensando dedicarse a la investigación?
Lo que digo siempre cuando viene algún estudiante preguntándome por hacer una tesis es que lo piense bien porque es una decisión importante. Como casi todo en investigación es a largo plazo, y entiendo que no es para todo el mundo, depende mucho de tus preferencias o tus intereses vitales. Si no lo tienes claro es un camino bastante duro, pero si te gusta y te apasiona siempre les animo. Yo miro para atrás y no me arrepiento de nada del día que tomé la decisión de dedicarme a la investigación. Pero, creo que hay que tenerlo medianamente claro, porque cuando empiezas tampoco sabes cómo son las cosas, esa es la realidad, pero sí que es una decisión importante, sobre todo, porque es a largo plazo.
DE CERCA…
Qué estudió: Ingeniería de Telecomunicaciones e hice la tesis en Ingeniería Biomédica.
Un sueño por cumplir: Escalar el Cervino.
A qué se dedica en su tiempo libre: Fundamentalmente a estar con mi familia, ahora principalmente con mi hijo pequeño. Paso mucho tiempo con él, cosa que me encanta. Por otro lado, a nivel un poco más personal lo que me encanta es el alpinismo y la escalada.
Un libro: El Señor de los Anillos. Fue el libro que cuando era adolescente me enganchó a la lectura.
Una película o serie: La milla verde
Grupo musical o cantante favorito: Amaral e Ismael Serrano
Un viaje: Me encantaría ir a Islandia.
Cómo se definiría: Soy una persona constante, trabajadora y también transparente.