¿Por qué decidió dedicarse a la investigación?
No es algo que siempre haya tenido claro. Hice un máster en Italia y a partir de ahí comenzó mi interés por la investigación, probablemente, por la forma en la que los profesores explicaban las cosas o por los cursos que seguía. Poco a poco, quise ir más allá de las explicaciones de los profesores, profundizar más. Esto me llevó a hacer una tesis del máster con un poco más de investigación, me gustó mucho y decidí seguir con el doctorado, que me encantó, sobre todo, gracias a las interacciones con mis supervisores, dos personas fantásticas y científicamente rigurosísimas. Es como una pasión que se ha ido desarrollando.
¿Cuánto tiempo lleva vinculado al I3A y qué destacaría del Instituto?
Llegué en plena pandemia, en septiembre de 2020, y el primer año formaba parte del centro, pero no había ido nunca al I3A porque trabajábamos sobre todo desde casa. Pero me sorprendió mucho la habilidad con la que el I3A gestiona los proyectos europeos, la rapidez con la que resuelve los problemas con el clúster, por ejemplo. Lo que puedo decir también es que está lleno de gente con la que me encanta trabajar. Todas las interacciones personales que he tenido y con la Dirección del I3A han sido muy positivas.
En su grupo de investigación, ¿cuáles son sus líneas o áreas de trabajo más destacadas?
Lo que llevo yo en el Grupo de Tecnologías Fluidodinámicas es entender cómo fenómenos microscópicos, mecánicos o químicos afectan a las propiedades microscópicas, por ejemplo, de mezclas de polímeros para procesos industriales o reactores químicos. También, estoy trabajando sobre la mecánica y la química en el núcleo celular. La línea común de todas esas investigaciones es entender cómo se puede modelizar lo que pasa a escalas muy pequeñas y cómo eso influye a una escala más grande.
¿Hay algún proyecto del cual esté más orgulloso debido a su impacto en la sociedad o en el ámbito académico?
Como soy joven solo he liderado unos pocos proyectos. Sin embargo, quería destacar el proyecto que nos financió la DGA en 2021 para investigar la mecánica del núcleo de la célula y cómo se acopla con la expresión genética de la misma. Es un proyecto que me ha permitido colaborar con otros grupos del I3A, en concreto con el M2BE, conocer muchas personas fantásticas y aplicar mis ideas en un entorno de investigación completamente nuevo para mí.
¿Cómo visualiza el futuro de su área de investigación? ¿Hay tendencias o desafíos que le parezcan particularmente interesantes o importantes?
Para mí, todo es un desafío. Cada cosa, cada problema que se descubre, es un desafío, algo que sorprende a la vez que se hace la investigación. Hay muchas cosas que no las esperábamos y que no las podíamos prever, es algo que me emociona, me divierte. Si nosotros supiéramos ya siempre todo lo que va a pasar en un proyecto, sería un poco aburrida la investigación. Así que tengo muchas ideas de las líneas de investigación a las que me quiero dedicar con ideas que surgen a partir del desarrollo de proyectos actuales.
¿Qué es lo que más disfruta de su profesión? ¿Y lo que menos?
Sin duda, lo que disfruto más es la sorpresa que te encuentras durante la investigación. Por ejemplo, se está analizando algún resultado experimental y te surge algo que es totalmente inesperado que nadie había observado antes y que te sorprende. Eso me da emoción y me anima a seguir investigando. Y, sobre todo, cuando lo descubren tus estudiantes, la gente que trabaja contigo es satisfactorio.
Sobre lo que menos me gusta, hay algunos aspectos burocráticos pero que son parte de la investigación y de todos los países. También, el tiempo que a veces te hace falta para llegar a todo y que es un trabajo difícil para desconectar porque piensas mucho en los resultados que han surgido. Igualmente, puedo añadir las ideas que tenemos que dejar por no poder responder a todo. También, es frustrante no encontrar gente que quiera investigar en esas líneas.
¿Qué le diría a quien esté pensando dedicarse a la investigación?
Que no pierda esa capacidad de seguir emocionándose casi como un niño que descubrió algo nuevo al largo de su carrera. Esta capacidad de sorprenderse con resultados inesperados es la mecha que tiene que estar en nuestro trabajo.
DE CERCA…
Qué estudió: Ingeniería Química
Un sueño por cumplir:aprender a cocinar todos los dulces típicos de mi región.
A qué se dedica en su tiempo libre, cuáles son sus aficiones: tengo pasión por la Historia. Últimamente, es la afición a la que dedico más tiempo.
Un libro: El Aleph de Jorge Luis Borges o Q de Luther Blissett
Una serie: True Detective
Grupo musical o cantante favorito: Tool o Muse
Un viaje: hecho, Grecia y que me gustaría hacer, India
Cómo se definiría: como un soñador