Hablar de Manuel Silva va mucho más allá de su presentación como catedrático de Ingeniería de Sistemas y Automática de la Universidad de Zaragoza, le acompaña una larga trayectoria docente e investigadora, un sinfín de premios y reconocimientos y un importante papel impulsor en la hoy Escuela de Ingeniería y Arquitectura (EINA) y del Departamento de Informática e Ingeniería de Sistemas (DIIS).
Hoy, en un acto organizado por el DIIS en el edificio Ada Byron, que se ha emitido online, se ha recordado su papel y su implicación en el Campus Río Ebro. Como parte del reconocimiento a su extenso e importante trabajo, el seminario del Departamento de Informática e Ingeniería de Sistemas llevará su nombre. Un homenaje con el que la comunidad docente e investigadora ha querido mostrarle su respeto y su cariño, el día de su 70 cumpleaños y antes de que se jubile al final de este curso académico.
Manuel Silva ha dedicado 43 años de su vida a la docencia y la investigación en la Universidad de Zaragoza. “Maestro de maestros”, ha dicho el director del Departamento de Informática e Ingeniería de Sistemas, Cristian Mahulea, destacando sus aportaciones a las actividades científicas nacionales e internacionales, mientras resaltaba la “perseverancia” de Silva, su “pasión por lo que hace” y su aspiración por la “perfección”.
Ha sido “uno de los padres de la Escuela”, así lo ha expresado José Antonio Yagüe, director de la EINA, recordando todos los pasos que se fueron dando desde aquella Escuela Técnica Superior de Ingenieros Industriales, pasando por el Centro Politécnico Superior hasta llegar a la EINA. Yagüe ha definido al profesor Silva como un “trabajador incansable y con una gran visión estratégica”, al tiempo que ha resaltado sus valores.
Algo que también ha subrayado Pablo Laguna, director del Instituto de Investigación en Ingeniería de Aragón (I3A), “su energía, ambición positiva, luces largas y universalidad son sus señas de identidad”. Ha recordado, además, la faceta humanista y social de Manuel Silva, tal y como se puede ver en sus múltiples publicaciones, destacando su icónica obra: Técnica e Ingeniería en España.
“Tempus fugit”
Así ha empezado su intervención Manuel Silva en este acto del DIIS. Mientras explicaba cómo fue tomando forma el Departamento de Informática e Ingeniería de Sistemas, que partía de unos inicios en los que, según ha contado, podía decir aquello de “el departamento soy yo”.
Había que desarrollar la Informática como disciplina, la primera asignatura de Robótica, “era necesario que las TIC tuvieran mayor implantación en Aragón”, ha explicado.
Y en ello puso todo su empeño, apostando por una nueva Universidad, viendo claro que Zaragoza “no podía quedarse atrás”. Pero las cosas no fueron fáciles, “dicen que el camino se hace al andar, pero a veces hay que desbrozar y hasta quitar rocas”.
Quienes le conocen bien saben que para Manuel Silva las dificultades nunca han sido un freno para luchar por aquello en lo que cree, por muchas reuniones a las que haya que asistir, puertas a las que llamar o enfrentarse a la lentitud que puede acarrear un proceso en la Administración Pública.
Hoy, ese Departamento de Informática e Ingeniería de Sistemas le ha rendido un homenaje para agradecer su implicación personal y profesional, mientras él se muestra orgulloso de haber puesto las bases y de que hoy sus discípulos le superen.